¿Se puede empezar a invertir sin tener dinero? Aunque suene contradictorio, sí se puede.
No necesitas miles de euros ni una herencia sorpresa para comenzar tu camino como inversor.
Lo que sí necesitas es conocimiento, estrategia y una mentalidad de crecimiento. Y hoy, con las herramientas y recursos gratuitos que existen, dar el primer paso está más cerca de lo que crees.
Aquí te contamos cómo hacerlo, paso a paso, y qué plataformas, cursos y oportunidades puedes aprovechar para convertirte en inversor aunque tu cuenta bancaria esté en números rojos (o casi).
1. Cambia tu mentalidad: invertir no es solo dinero, es preparación
Invertir no se trata únicamente de poner dinero en un activo y esperar que suba. Es un proceso mental y educativo.
Puedes empezar invirtiendo en lo más valioso que tienes ahora mismo: tu tiempo.
Aprender sobre los mercados, entender cómo funciona la bolsa, qué son las criptomonedas o cómo se analiza una empresa son los primeros pasos reales que todo inversor debe dar.
Y eso no cuesta nada más que atención y constancia.
2. Fórmate gratis: cursos de bolsa, trading y criptomonedas sin coste
¿No tienes capital? Entonces tu foco debe estar en formarte antes de arriesgar ni un euro. Hoy en día hay cursos gratuitos de altísima calidad que te enseñan a invertir paso a paso, sin humo ni promesas vacías.
Uno de los más recomendados es el Curso de Bolsa desde Cero de Traders Business School (TBS). Es 100 % gratuito, en directo, y está impartido por traders profesionales que explican cómo empezar a invertir con lógica y sin capital inicial. Aprenderás:
- Cómo funciona el mercado bursátil
- Qué tipo de activos existen (acciones, ETFs, índices)
- Cómo hacer una operación real en demo
- Qué errores debes evitar desde el principio
Además, TBS ofrece también cursos gratuitos en trading algorítmico, criptomonedas y estrategias prácticas. Ideal si estás empezando y quieres avanzar con fundamentos.
3. Simuladores de inversión: practica sin arriesgar dinero
Una vez que hayas aprendido lo básico, toca practicar. Pero no necesitas abrir una cuenta con dinero real. Puedes empezar con cuentas demo o simuladores de inversión.
Estas plataformas replican el comportamiento real de los mercados, pero te dan dinero virtual para operar. Así puedes aplicar lo aprendido, probar estrategias y ver cómo te desenvuelves bajo presión sin riesgo.
Algunas herramientas recomendadas:
- TradingView (versión gratuita con cuenta demo)
- MetaTrader 4 y 5 (muy usado por traders de Forex)
- DEGIRO – modo de prueba (ideal para empezar en acciones europeas)
4. Invierte tu tiempo en aprender sobre activos alternativos
Si bien muchos empiezan por acciones o ETFs, también puedes aprender sobre activos más accesibles o de menor coste, como:
- Criptomonedas: puedes hacer DCA (Dollar Cost Averaging) desde 5 € al mes en plataformas como Binance. Además, muchas plataformas ofrecen programas de aprendizaje con recompensas.
- Crowdlending o crowdfunding inmobiliario: hay plataformas que permiten invertir desde 10 €, aunque se recomienda hacerlo con criterio y con conocimiento previo.
- Tokenización y activos digitales fraccionados: algunos proyectos permiten invertir en obras de arte, inmuebles o startups desde montos muy bajos.
El objetivo no es que empieces a poner dinero ya, sino que te familiarices con estas opciones y evalúes su potencial.
5. Crea tu primera estrategia de inversión… en papel
Aunque todavía no vayas a invertir dinero real, ya puedes diseñar tu propia estrategia. Establece metas, define tu perfil de riesgo, elige tus activos ideales y simula cómo actuarías ante diferentes escenarios.
Esto te entrena mentalmente y te prepara para cuando tengas tu primer capital. Algunos consejos para tu estrategia:
- Define un horizonte temporal (¿quieres invertir a corto o largo plazo?)
- Establece una tolerancia al riesgo
- Elige el estilo: inversión pasiva, trading, cripto, etc.
- Simula con cuentas demo y analiza resultados semanales
6. Crea un fondo de inversión personal
Aunque empieces sin dinero, tu objetivo debe ser generar el primer capital para invertir. ¿Cómo hacerlo?
- Ahorra de forma inteligente: automatiza pequeñas aportaciones semanales o mensuales (aunque sean 5 €)
- Elimina gastos hormiga (suscripciones, caprichos innecesarios)
- Crea ingresos extra: freelancing, venta de cosas que no uses, tareas puntuales online
Una vez tengas algo de capital reunido, ya puedes pensar en pasar a real… pero siempre con una estrategia clara.
7. Únete a comunidades de inversión
No tienes que hacer este camino solo. Existen comunidades de traders e inversores donde puedes aprender, compartir ideas, resolver dudas y mantenerte motivado.
TBS, por ejemplo, ofrece acceso a su comunidad privada a todos sus alumnos, incluso en los cursos gratuitos.
Participar en una comunidad es clave para evitar errores comunes, contrastar opiniones y aprender de quienes ya han pasado por donde tú estás.
8. Empieza con productos sin mínimo de inversión
Cuando des el paso al dinero real, elige productos que no exijan grandes cantidades iniciales. Algunas plataformas permiten invertir en:
- Acciones fraccionadas (puedes comprar parte de una acción de Amazon o Apple por menos de 10 €)
- ETFs accesibles desde 1 €
- Criptomonedas desde 1 € (aunque recuerda: altísima volatilidad)
- Fondos indexados sin mínimo (vía roboadvisors o brokers como Indexa Capital)
Conclusión
No tener dinero no es excusa para no empezar a invertir. De hecho, los mejores inversores comenzaron invirtiendo en lo que tenían a mano: conocimiento, tiempo y mentalidad.
Si aprovechas los recursos gratuitos que existen, como los cursos de TBS, las cuentas demo y las comunidades activas, puedes prepararte con fuerza y sin riesgo.
Y cuando llegue el momento, tendrás no solo capital, sino también confianza, estrategia y criterio para invertir de forma rentable.
Empieza hoy. Sin dinero, pero con decisión.


